Son las dos de la madrugada. Y, por cuarta noche consecutiva Cristina abre súbitamente los ojos. Ahora ya no puede dormir más de tres horas seguidas. Su sistema nervioso automático la despierta con el corazón acelerado, las manos frías, y un extraño y placentero nudo en el pecho. ¿Sospechará algo su marido? ¿Cómo estar segura? Lo que Javier no sabe es que, desde hace tres meses, su mujer se comunica a escondidas con un ex novio de la Escuela Secundaria. Los mensajes, al principio inocentes, poco a poco se han ido encendiendo en contenido y significado. “Empiezo a sentir que te de nuevo quiero, que te nuevo te amo. A todas horas pienso en ti…” , fué el último mensaje de aquél antiguo amor. “Yo… yo… también” le había respondido ella, e inmediatamente había eliminado los mensajes, apagado y escondido el móvil encima de un enorme armario. Y bien cubierto por un montón de viejas revistas.
A su lado, Javier duerme plácidamente, ajeno a toda este incendio sin control que su mujer intenta, procura disimular lo mejor posible. Duerme Javi, con el sosiego de quien se siente muy bien arropado por la fidelidad de su mujer. Una mujer que un día le juró amor eterno.
Él no lo ha notado – todavía – pero desde hace tres semanas están brotando comportamientos nuevos en su esposa. Conductas que, a ojos de un psicólogo de la Conducta, serían prueba evidente de que algo anda mal para él. Muy mal.
Psicológicamente hablando, las personas nos comportamos principalmente según las recompensas. O reforzadores, como siempre explico en mis videos. Por ahí nos vamos. Detrás del reforzador más potente. El que más nos motive. El que más nos guste. Cristiano va tras más Champions – lo dijo esta mañana -, Messi tras la copa del Mundo, Cristina, tras … ¿qué será? Ya lo veremos. Ya lo veremos.
Pero ahora lo más inportante. ¿Tras qué vas tú? ¡Cuál es tu reforzador principal? Ya lo veremos. Ya lo veremos. Y, descubrirlo será crucial, aunque no tan fácil. Pero si no lo haces bien, poco control tendrás sobre tu propia vida. Ah, pero si lo consigues… el dominio sobre tu propia vida será más que eficiente. Empezarás no solo a comprender porqué te comportas como lo haces, sino que sobre todo, ¡sabrás cómo modificar tus comportamientos para siempre!
Esta es una historia real, de nuestra consulta; de cómo una mujer llamada Cristina (se ha cambiado el nombre) se ve envuelta en una situación más que común en nuestros tiempos: Ser la amante.
Se narra tal como sucedió y con autorización. Bien, pues ésta es su historia, en entregas diarias, o interdiarias. Te enseñarán a entender cuáles son los procesos psicológicos envueltos en una situación como ésta y, lo más importante, cómo salir de ella. ¿Qué te parece?…
Espero tu opinión…
#Amantes